El sistema tributario de Estados Unidos es uno de los más complejos del mundo, pero comprender sus fundamentos es esencial para cumplir con sus obligaciones fiscales. Los particulares deben presentar una declaración de impuestos anual, en la que declaran sus ingresos y deducciones. Si tiene un negocio, sus responsabilidades fiscales pueden incluir impuestos sobre la renta, sobre las nóminas y sobre las ventas.

Para las empresas, es importante llevar un registro detallado de todas las transacciones y gastos. Esto no sólo facilita la preparación de impuestos, sino que también le permite maximizar las deducciones y reducir su carga fiscal. Considera la posibilidad de contratar a un contable o utilizar software especializado para mantener tus finanzas en orden.

Si es usted inmigrante, puede tener obligaciones fiscales tanto en Estados Unidos como en su país de origen. En estos casos, conviene buscar asesoramiento profesional para evitar la doble imposición y aprovechar los convenios fiscales internacionales.